VINO Y PERFUME
Los dos son fuentes de placer para el sentido del olfato pero en teoría se recomienda no juntarlos. ¿Por qué? Imaginaros una sala de catas repletas de sumilleres concentrados en las cualidades organolépticas de los vinos. El perfume puede desvirtuar la cata donde más de un 40% de su importancia reside en la puntuación olfativa. Por eso hay un reconocido concurso de vino que se llama “la nariz de oro” que consiste en adivinar la tipología, zona, variedad del vino con sólo olerlo, en unas copas negras sin poder llevarlo a la boca. ¿Cómo maridar, entonces, vino y perfume? La verdad es que la mayoría de veces que tomamos vinos se debe a una ocasión especial y para ello vestimos nuestros olores corporales de gala. Tal vez una idea descabellada juntar perfume y vino pero que en la vida real van de la mano. Como regla general podríamos decir que un perfume con incieso y madera le iría bien un vino de crianza. Una fragancia más floral, una variedad terpénica blanca como el gewurzstraminer o rieling. Un aroma exótico, con incienso y cítrico, con un vino con personalidad y tal vez fortificado con aromas a chocolate.
Un comentario
Rafa
Hola, buen día :
Recuerdo la mala leche que tenía una persona cuando por primera vez se da cuenta de que el desodorante que utilizo aún siendo bastante neutro y según sus comentarios entorpecía la labor que se hacía en bodega.
No sé, creo que no será para tanto.
Cual es la finalidad de un vino ? Aquí estaremos todos de acuerdo, aportar un pequeño momento de disfrute que acompañe a la situación en sí.
Bueno, pues yata ! Excepto en ocasiones específicas donde lo que se busca es la complejidad e intensidad de aromas, el resto nain de nain.
Creo que me excedería si afirmara que el 5% de los consumidores de vino se llevan el vino a la nariz.
Pensemos que somos 4 gatos (miauu) los que analizamos la fase olfativa de un vino y que el resto del mundo mundial pasa de estos conceptos y simplemente busca que el vino le aporte compañía y un toque chic porque está de moda.
Humildemente, creo que nos comemos demasiado la cabeza y que el consumidor busca conceptos más simples.
Ciao. Wine republic !!