Vídeo-catas con Meritxell Falgueras: Prado Enea Gran Reserva 2005
PRADO ENEA GRAN RESERVA 2005
Bodegas Muga
D.O. Rioja
Prado Enea Gran Reserva 2005 – Bodegas Muga
Tenemos el placer de daros a conocer uno de los vinos insignia de la Rioja Alta, el Prado Enea Gran Reserva de la añada 2005. Su composición varietal pesa en un 80% con la Tempranillo, mientras el 20% restante del vino se complementa con Garnacha, Mazuelo y Graciano. Su ejecución es curosa y excepcional, las uvas siempre con una maduración óptima fermentan en depósitos de roble de 10.000Kg de capacidad, sin control de temperatura ni adición de levaduras, una maceración variable que puede prolongarse hasta 20 días y una crianza de 12 meses en barricas de roble y un mínimo de 36 meses en botella.
El resultado es un excelente vino que desprende madurez nada más abrir la botella, sus aromas en el corcho hablan de su largo diálogo con la mirco-oxigenación con el caldo durante su crianza en botella. Servido en copa exhibe su rojo rubí intenso de corazón cereza con ligeros tonos teja marcados en el borde. En apenas removerlo salta en nuestra nariz su grácil expresividad, detectamos inicialmente su base a frutas rojas maduras pero que evoluciona según toma aire, notas de madera como el cedro o la acacia siguiéndole matices especiados y a hierbas del bosque. Cuando lo llevamos a la boca brilla noble su fuerza, consistente, con los taninos trabajados pero suaves. Su acidez está perfectamente equilibrada esencial para brindar la perfecta harmonía de tal complejidad de matices.
Un vino muy bien ejecutado, adulto en todos los sentidos y con mucha vitalidad. El Prado Enea es un Gran Reserva ejemplar que se convierte en una inolvidable exhibición de experiencia y calidad para deleitar tus sentidos.
Meritxell Falgueras
Más sobre Bodegas Muga:
Bodega familiar fundada en 1932, enraizada en el Barrio de La Estación de Haro (La Rioja), sus instalaciones están asentadas sobre un edificio bicentenario, con la piedra y el roble como elementos centrales del mismo. En sus cerca de 25.000 metros cuadrados, todo gira alrededor del roble, protagonista inequívoco, siendo la única bodega que utiliza madera de roble en todo el proceso de fermentación, almacenamiento y crianza del vino, prescindiendo del acero inoxidable. Hasta tienen tres toneleros y un cubero construyendo sus propias barricas y depósitos de forma artesanal.

