te quiero más que a mi tapaojeras
Yo no sé si los vinos tienen sentimientos, aunque estoy segura que transmiten muchas emociones. Hoy cuando me estaba maquillando me preguntaba si el vino necesita ese toque de madera como base, porque si no no tiene una piel tersa. Bueno, yo más que para estar guapa, utilizo el tapaojeras para no parecer una zombie. Tal vez para el vino lo más parecido a mi tapaojeras sea la aireación que necesita para despertarse del sueño de la botella. No me sé pintar, por ello no lo hago, no por natural, sino por inculta en el tema. Ahora, sin mi corrector, que me ayuda a cubrir las manchas y el hinchazón de ojos de la mañana, puedo salir a la calle, pero asusto un poco. Como el vino que después de muchas horas en reducción necesita decantarse. Lo único que sé es que cuando me olvido el tapaojeras es peor que cuando me olvido el abridor, ¡aunque nunca comparable a no encontrar el iphone! Una vez vi o leí un cuento en que alguien decía “te quiero más que la sal” y la princesa se enfadaba porque le sabía a poco. Después una maldición le mostró lo que sería la vida sin sal. Si amo a alguien más que a mis horas de sueño, al estar a mi casa, a mi obsesión por el trabajo, al viacrucis de coger tantos vuelos y a mis momentos de desestrés os lo prometo que ese sentimiento sólo es comparable al tapaojeras que necesito para seguir queriéndolo a este ritmo. Espero en cuanto lleguen los rayos de sol haya encontrado la manera de estar cerca de él sin necesidad de taparme las ojeras y que pueda dormir con la cara desnuda en su pecho. Porque los vinos que te enamoran no les hace falta que se les cubra la piel.
4 Comentarios
Marc
Vols dir que no ha arribat la primavera? Entre la presentació del Bollinger del Dissabte, la caloreta d’aquests dies i aquestes linees no cal esperar a que arribi.
Meri
Siiii!!!! La primavera ya llegó ya llegó ya legó y si no me la invento!!!!
Maria
Hija, me estresa solamente oirte como eres capaz de hacer tantas cosas estupendas, volar tanto, estudiar tanto, y saber tanto. Como lo haces?, claro, tengo la respuesta: yo también podría, pero sin hijos!
Meri
Es que esto no es una competición, María, es un post en un blog que se habla de sentimientos y vino.
Un besazo de xarel·lo!