POESÍA Y VINO IN CASACA’S WORLD
Ya tengo la casaca roja con mi nombre: ¡todo un honor! Mis amigos, siempre afamados de sensaciones eno-gastronómicas, fueron capaces de soportar una de mis sesiones a lo “señorita, ¿puedo ir al lavabo?” sobre vino y poesía. Está claro, que los apacigüé con Cos d’Estournel 2004, Vega Siclia Único del 98, un Oremus 5 puttonyos del 2000, burbujas de Roederer, la originalidad de Quo Vadis…. Una cata que tenía como fondo «La Traviatta» y que pasó por las lecturas de Oman Khayyam, Pablo Neruda y la iconología de Dionisio y Baco (¡Paco para mis gourmets preferidos!). Una actividad divertida, lúdica y muy sensual: ¡festivaaaaaaaallllllll!